¿Eres consciente de la cantidad de veces que no expresas tus emociones?
Tal como lo indica la frase de Sigmund Freud: «las emociones no expresadas nunca mueren. Son enterradas vivas y salen más tarde de la peor forma»
Los motivos pueden ser muchos, pero lo que realmente interesante es que reconozcamos las emociones, intentemos no reprimirlas, en caso de «tener» que contenerla por las circunstancias que fuera, puedes expresarlas mas tarde, pero ¡hazlo!, grita, llora, pega un puñetazo sobre la mesa, haz lo que te haga sentir que liberas esa emoción.
Piensa que una vez que hayas descargado tu emoción sentirás una paz increíble, y te aseguras que esta emoción no resurge nuevamente en un momento que puede hacerte mucho más daño a ti y a los que te rodean.
Piensa que en nuestro cuerpo almacenar emociones también trae consecuencias: atracones, caída del cabello, eccema, acné, etc. No vale la pena sufrir las consecuencias de retener las emociones dentro nuestro.