¿Que es el Síndrome de inmunodeficiencia adquirida?

El  Síndrome de Inmunodeficiencia adquirida, por sus siglas: SIDA, es una enfermedad que afecta el sistema inmunológico, por lo que quien la padece es más susceptible a otras enfermedades infecciosas e inclusive se desarrollan infecciones por microorganismos que en otras circunstancias no nos ocasionarían daño alguno.

La definición según la OMS:” enfermedad infectocontagiosa de carácter grave, con una gran heterogeneidad de síntomas y signos clínicos, debido a la acción de un virus que una vez ingresado al organismo, ataca fundamentalmente su aparato inmunitario, disminuyendo sus defensas orgánicas, dejando vulnerable al individuo infectado a múltiples agentes infecciosos que pueden provocar su muerte.”

Forma de transmisión y complicaciones del síndrome de inmunodeficiencia adquirida: SIDA

• Su transmisión es por sangre, semen, secreciones vaginales y por vía materno infantil.
• Una de las complicaciones más importantes del SIDA es la pérdida de peso por autoconsumo del organismo, un proceso que se denomina síndrome de desgaste. Al presentarse un requerimiento de energía más elevado que el aporte que se asimila en el cuerpo utiliza las reservas corporales de energía (principalmente la grasa), y al agotarse estas se obtiene energía destruyendo tejidos corporales (músculo principalmente). El síndrome de desgaste acarrea una desnutrición importante, la pérdida de músculo puede llegar a darse a niveles incompatibles con la vida.
• Existe un incremento en los requerimientos nutricionales a causa de los procesos infecciosos que exigen un mayor aporte, tanto por la elevación de temperatura como por los tejidos que hay que reparar, por desórdenes metabólicos que aceleren el ritmo metabólico.
• Una de las consecuencias más comunes del SIDA, es la desnutrición, la cual se presenta porque el enfermo disminuye su ingestión de alimentos por la falta de apetito,
• Pérdidas importantes que ocurren con los episodios de diarrea y vómito, que, además, acarrean el riesgo de deshidratación y otros problemas metabólicos ya que durante las evacuaciones diarreicas se pierde una importante cantidad de líquidos y minerales.
• Es frecuente que los pacientes que sufren el SIDA pueden tener problemas infecciosos crónicos del colon, en los que las infecciones virales, infestaciones parasitarias y otras llegan a condicionar diarreas profusas con pérdidas de proteínas
• Los pacientes del SIDA pueden presentar trastornos gastrointestinales que afectan su estado de nutrición: mucositis, mala absorción y aumento del catabolismo. Estos factores modifican la composición corporal de los enfermos, quienes tienen una marcada reducción de la masa muscular y de la masa grasa, lo que les lleva a un estado de caquexia muy similar a la presentada en pacientes con cáncer
• Tanto la diarrea y el vómito como la anorexia, pueden ser consecuencia directa de la enfermedad o del tratamiento médico, ya que el control de la infección por el Virus de Inmunodeficiencia humana (VIH) se utiliza  fármacos muy fuertes.
• Las personas con SIDA tienden a presentar fatiga como resultado de la deficiencia de hierro, la cual suele pasar desapercibida 
• Un alto porcentaje de individuos que padecen de SIDA mueren más por la desnutrición que desarrollan que por la misma enfermedad, mientras que los pacientes que mantienen un buen estado nutricional, presentan menor riesgo a padecer las infecciones oportunistas que se presentan ante un sistema inmunológico deprimido.

Este artículo es orientativo, NO sustituye la consulta con su Nutricionista