Continuando con el tema sobre la importancia que tiene la nutrición para el mantenimiento de una piel sana y joven, pasaremos a describir cuales son los nutrientes esenciales para lograr este objetivo.
El agua es el primer nutriente básico y fundamental para mantener la piel joven y sana. Y esta hidratación se consigue desde dentro. Es por ello que es indispensable el consumo de por lo menos 1, 5 litros de agua al día.
De los antioxidantes que se utilizan debe tenerse claro que ninguno por si solo es protagonista en exclusivo contra los radicales libres. Cada uno constituye un eslabón más de una cadena que coordina y ayuda de forma sinérgica y equilibrada a combatir en distintas zonas de la célula al radical que trae la inestabilidad al ecosistema celular
El primer nivel de defensa lo constituye la vitamina C que lo encontramos en los líquidos extracelulares que conjuntamente la proteína llamada glutatión contenida dentro de las células suministra soporte a la célula.
La vitamina E es el centinela ubicada en la membrana celular mantiene el equilibrio entre la grasa e impide la entrada de elementos agresores, con la asistencia de la coenzima Q10 que regula la combustión de energía para evitar que salten chispas.
Los flavonoides brindan un apoyo logístico a la vitamina C y potencian a la vitamina E conjuntamente con el selenio incrementando la capacidad antioxidantes de los betacarotenos.
Está demostrado que la acción conjunta de los diversos antioxidantes es mucho mayor que si se toma por separado. Debe procurar tomar un antioxidante combinado que contenga la tríada mágica: vitamina C, vitamina A (carotenos) y vitamina E, si además contiene un antioxidante fenólico flavonoide o resveratrol mucho mejor.
El aporte de vitamina A favorece la regeneración del colágeno, mediante la estimulación de los fibroblastos que lo producen.
Los minerales como el zinc y el selenio son muy importantes en los numerosos procesos de la vida de la célula de la piel. Aunque su requerimiento es mínimo, pero este debe ser aportado a diario.
El selenio en dosis mínima es un excelente remedio en el tratamiento del acné y dermatitis seborreica y protege la piel de los rayos ultravioletas. Y parece tener un efecto preventivo en el cáncer de piel.
La coenzima Q10 su producción se ve disminuida con la edad, es un potente antiarrugas y ayuda a mantener la piel sin manchas.
A mayor consumo de dosis de antioxidantes parecen ofrecer mejores resultados, siempre cuidado que los elementos que consumimos no causen daño por acumulación (sobre todo de las vitaminas liposolubles), consulte siempre con un profesional antes de consumirlo.
A partir del desarrollo final de un individuo es cuando se acentúa progresivamente los procesos oxidativos, y es a partir de ahí que se realiza la recomendación de una suplementación antioxidante.
Ceramidas: son productos lipídicos formados por un ácido graso y un esfingolípido que tienen la propiedad de mantener y mejorar el grado de hidratación de la piel tanto en uso externo como ingeridos. Se encuentran en algunos alimentos
Alimentos:
Los alimentos que perjudican y deterioran la piel son las pastas, grasas de origen animal, el cacahuete, cacao, coco. Se debe consumir con moderación conservas y embutidos
Este artículo es orientativo, NO sustituye la consulta con su Nutricionista.