¿Cuál es el objetivo de una suplementación correcta en paciente con cáncer y cómo funciona?
Es muy difícil realizar estadísticas sobre la eficiencia de la suplementación en los pacientes de cáncer. Pero, a nivel de consulta individual en el cual el nutricionista se asegura la constancia de los equilibrios nutricionales, según la sintomatología y los resultados analíticos del paciente tanto previo al tratamiento, así como durante el mismo podríamos observar:
- Mejor tolerancia al tratamiento y recuperación del mismo a través de una menor fatiga, menor nauseas, etc.
- Mejora en la rapidez y calidad de la respuesta a los tratamientos aplicados.
- La calidad de vida durante el tratamiento.
La suplementación del paciente con cáncer debe incluir: proteínas de alto valor biológico, vitaminas generales, vitamina A y carotenoides, selenio, cinc, vitamina E y hierro.
Es importante recordar, que la suplementación se debe llevar a cabo con una dieta adecuada nutricionalmente y personalizada.
Como funcionan estos suplementos:
- Proteínas de alto valor biológico: Las proteínas se necesita para mantener nuestros tejidos, favorecer el mantenimiento de nuestro sistema de defensa. En las fases de anorexia uno de los alimentos que se tienden a tener más rechazo son a las correspondientes a las proteínas y el no consumirla, obliga al organismo a obtenerlas de la masa muscular que necesite. Esto podría prolongar el tiempo de recuperación de la enfermedad y reducir la resistencia a las infecciones. Las personas con cáncer a menudo necesitan más proteína de lo común. Después de la cirugía, la quimioterapia o la radioterapia, normalmente se necesita proteína adicional para sanar los tejidos y ayudar a combatir las infecciones. Es importante que se asegure el aporte de todos los aminoácidos esenciales, que no genere residuos y que sea absorbida de una forma rápida.
- Multivitaminico: Es conocido que en condiciones de alimentación equilibrada y con un buen estado de salud, suele tener las necesidades de vitaminas y minerales cubiertas. Pero puede ser difícil comer una dieta balanceada al estar recibiendo un tratamiento contra el cáncer, especialmente si los efectos secundarios que surgen perduran por periodos prolongados. Si la ingesta de alimentos ha sido limitada por varias semanas o meses debido a los efectos del tratamiento, es importante mantener un control analítico de los niveles de vitaminas para poder adecuarlas a su necesidad.
- Vitamina A y carotenoides: en este caso es recomendable utilizar los pigmentos vitamínicos de origen vegetal o carotenoides (beta caroteno) con el único objetivos de poder destruir los radicales libres, son los más eficaces captadores de oxígeno.
- Vitamina E o alfatocoferol: también es un antioxidante esencial. Su acción está asociada al selenio, protege al resto de vitaminas A y C de la oxidación. La vitamina E protege de la inmunosupresión inducida por los rayos solares. Es utilizado sobre todo para la protección del miocardio de las irradiaciones y de ciertos medicamentos.
- Vitamina C: Esta vitamina actúa sobre la parte con más contenido de agua de la célula y actúa en sinergia con la vitamina E para su regeneración. Su efecto antioxidante actúa sobre todo a nivel de las mucosas tanto orales como intestinales.
- Cinc: es parte importante en el tratamiento contra los radicales libres, pues entra de una forma directa o indirecta en la composición y metabolismo de muchas enzimas, que tienen importancia en la lucha contra el cáncer. Además es conocida su función en mejorar la formación de defensas en nuestro organismo.
- Hierro y ácido fólico: los niveles bajos suelen ser los causantes de la debilidad en los pacientes con cáncer. Es recomendable suplementar siempre que las analíticas den unos valores bajos.
- Fitonutrientes: Los fitonutrientes o fitoquímicos son compuestos vegetales como carotenoides, licopeno, resveratrol y fitosteroles que se piensa que tienen propiedades que protegen la salud.
Esta suplementación debes ser recomendada y diseñada por una nutricionista, que además se acompaña con una dieta adecuada a las necesidades del paciente
Este artículo NO sustituye la consulta con un Nutricionista