Se suele utilizar para tratar el estreñimiento, en la enfermedad diverticular, en la obesidad, diabetes, hipercolesterolemias, enfermedades cardiovasculares.
Esta dieta tiene como objetivo favorecer la eliminación regular de las heces y el incremento de la excreción fecal. Se debe tener en cuenta que este tipo de dieta puede tener como efecto secundario la disminución de la absorción de calcio, hierro, zinc y otros minerales.
Está constituida por alimentos que integran la dieta normal del paciente, pero incluyendo alimentos con mayor contenido de fibra, suplementando con fibra o bien incrementando el número de raciones.
Es importante cuando se instaura una dieta rica en fibra por primera vez, este incremento se debe hacer de una forma progresiva, ya que la implantación inmediata puede tener como efectos secundarios intolerancia y malestar.
En esta dieta se deben evitar el consumo de alimentos como harinas, panes, pastas italianas, arroz refinado, se deben sustituir por integrales.
Las frutas se recomienda comerlas crudas, enteras y aquellas que lo permiten con la piel.
Una dieta elevada en fibra se encuentra entre 20 – 35 gramos al día.
Es importante vigilar el consumo de agua mínimo 1,5 lts. antes de las comidas nunca durante, esto ayudara ablandar las heces y realizar algún tipo de ejercicio, para poder ayudar a la motilidad intestinal
En el siguiente artículo hablaremos de las enfermedades que están relacionadas con las diarreas.
Importante: Este artículo es orientativo, no pretende sustituir la consulta a tu nutricionista: info@my-pdiet.com