Como una gran parte de los trastornos alimentarios es una alteración de la salud mental, la persona que lo sufre únicamente se concentras en uno o más defectos en su apariencia, este defecto puede parecer menor o a veces ni siquiera llega a ser visto por los demás. Pero para la persona que lo sufre puede llegar a sentirse avergonzado, intimidado y ansioso. En este caso es muy característico que la persona que lo sufre se aislé y tenga poca vida social.
Debemos entender que para las personas que sufren TDC la realidad y lo que perciben no es igual. En ningún momento se cuestionan lo que ellos perciben, considerando su percepción como una verdad absoluta. Y las opiniones que puedan recibir de sus amigos o parientes pasan a ser únicamente consuelos o engaños. Son personas que viven en constante estado de ansiedad y angustia, sus pensamientos obsesivos pueden llevarlos a generar conflictos dentro de su círculo más cercano (familia, trabajo, amistades). Se pueden llegar a someterse a cirugías radicales y agresivas para resolver el “supuesto defecto”
El Trastorno Dismórfico Corporal lo pueden sufrir por igual hombres como mujeres. Las defectos más frecuentes son: los de la nariz –aproximadamente un 45% de los casos–, dientes, arrugas, pelo, defectos del cuerpo (en las mujeres el pecho, abdomen, nalgas y en los hombres el tamaño de los genitales) y olores corporales.
El trastornos dismórfico también se le puede conocer como el Síndrome de espejo, lo suelen padecer entre el 1-2% de la población y ha sido muy comentada por haber aparecido en personajes relevantes que se hayan sometido a cambios muy relevantes en los medios de comunicación.
¿Por qué aparece la TDC?
La causa es desconocida pero algunas pueden ser;
Componente hereditario: el trastorno se presenta hasta ocho veces más frecuentemente en las familias con antecedentes de la patología. Se han verificado anormalidades en la función ejecutiva, el reconocimiento emocional y la auto-percepción visual, siendo la serotonina un modulador conductualmente relevante.
Entorno social o la cultura de la imagen: Actualmente la publicidad, redes sociales, promueven modelos que llegan a ser inalcanzables para todos, influenciando a las personas con problemas que se comparan y se cuestionan su propia imagen corporal, además hoy en día es más importante la apariencia que lo que eres.
Situaciones de burlas o acoso escolar (Bullying) durante la infancia o la adolescencia.
Acoso sexual, fracaso público en atletismo o danza, lesiones o enfermedades físicas
Presiones familiares: la familia o pareja que exigen un determinado canon de belleza.
Propias de la persona: el perfeccionismo, tienden a tener un nivel de auto exigencia muy elevado, búsqueda de aprobación social, baja autoestima, timidez, ansiedad, miedo a la soledad
¿Cómo se puede reconocer esta enfermedad?
Aparecen comportamientos compulsivos como pueden ser: chequeos frecuentes frente al espejo, o, evitar que sean observados.
Pueden llegar a gastar mucho tiempo y dinero en rituales de aseo, iluminación especial y espejos de aumento.
Suelen usar ropas o maquillajes, que logren camuflar esas imperfecciones percibidas, pueden inclusive llevarlos al aislamiento social y abandono de actividades laborales y escolares
Suele comenzar por la piel, cabello, nariz, abdomen, dientes, peso, torso, pechos, nalgas, ojos, muslos, cejas, forma del rostro, piernas, barbilla, labios, brazos, caderas, mejillas y orejas
Son los hombres, más propensos a sufrirlo tendiendo a obsesionarse con sus genitales, constitución corporal y calvicie, mientras que las mujeres, suelen centrarse en la piel, abdomen, peso, torso, nalgas, muslos, piernas, caderas, pies y aumento de vello facial y corporal
Recurren a todos los tratamientos cosméticos que existan que les puedan ayudar a arreglar ese defecto. Una vez que “han logrado” su objetivo tienen una satisfacción temporal.
Están constantemente comparándose con los demás.
Incrementan exageradamente su actividad física.
Pueden llegar a tener pensamientos suicidas
ALGUNAS RECOMENDACIONES:
Por lo general, el trastorno dismórfico corporal no mejora por sí solo. Si no se trata, puede empeorar con el tiempo y provocar ansiedad, depresión grave e incluso pensamientos y conductas suicidas. El tratamiento del trastorno dismórfico corporal debe incluir terapia cognitivo-conductual y medicamentos
Sería importante que se transmitiera un mensaje diferente en la sociedad, donde la natural diversidad de los cuerpos y las formas, se expresara con respeto y aceptación, y no con la crítica, la desaprobación o la comparación.
Este articulo es orientativo no pretende sustituir a la consulta de un profesional